Blake Griffin se ha convertido en el justiciero particular de una conocida cafetería de Los Ángeles. Al menos eso es lo que asegura el medio digital Ruckus Bucket, que ha desvelado el incidente en el que se han visto involucrados el ala-pívot de los Clippers y el popular y díscolo cantante canadiense, Justin Bieber.
Según el medio digital, Justin Bieber, que hace menos de un mes fue arrestado en Florida por conducción temeraria y hacerlo bajo los efectos del alcohol y de sustancias ilegales, entró en una conocida cafetería en Hollywood y tuvo un altercado con uno de los camareros.
El ídolo juvenil entró en el establecimiento sin camiseta y con los pantalones caídos, enseñando su ropa interior. Al ir a la barra a pedir su bebida, el camarero en cuestión, Joey Goldsmith le dijo que no podía atenderle. "Sólo le dije que si quería pedir tenía que ponerse la camiseta".
Ese fue el momento en el que Bieber estalló. Según el informe que hizo la Policía sobre lo sucedido, Bieber empezó a insultar al camarero y le amenazó con enviarle a su guardaespaldas "para patearle el culo".
En ese momento Blake Griffin, que se encontraba en una mesa cercana la barra, se levantó y se acercó a la zona donde estaba el cantante. Los testigos de la escena aseguran que el jugador de los Clippers intentó tranquilizar a Bieber, pero que éste no tenía ninguna intención de hacerlo.
Hubo más gritos y algunos empujones y fue entonces cuando Griffin golpeó Bieber, tirándolo al suelo. "Griffin le empujó", asegura un testigo. "Y entonces se vio al cantante saliendo por la puerta como si estuviera llorando". Bieber se fue antes de que llegara la Policía que, sin embargo, si tomó declaración a Griffin.
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