Después de saber que se lava los dientes con Jack Daniel's, que le gusta beberse su propia orina o que obliga a sus ayudantes a disfrazarse de pene, creíamos haber llegado a un punto en el que prácticamente nada de lo que dijera o hiciera Ke$ha podría sorprendernos, pero la autora de C'mon encuentra siempre la manera de dejarnos con los ojos abiertos como platos y la mandíbula desencajada.
Y la última ha sido de aúpa: en una reciente entrevista con la revista Heat, la cantante afirma que nació con rabo. Pero no, no es lo que pensáis; resulta que la cantante vino al mundo con una extraña protuberancia de hueso que le sobresalía en la parte baja de la espalda: "Era como una pequeña cola de animal, solo medía un par de centímetros, pero me la cortaron enseguida. Era muy pequeña y me robaron el rabo, es una historia triste..."
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